Recientemente The New York Times, recomendaba viajar a la capital española para dar el “pistoletazo de salida a un homenaje mundial a Picasso en un lugar que es una obra maestra en sí mismo”. Además de las Celebraciones del Año Picasso, AnneLise Sorensen destacaba que “el arte de la ciudad no está solo dentro de sus museos, sino también fuera de ellos: el núcleo cultural de Madrid es una obra maestra urbana de arte, naturaleza y luz, y en 2021, toda la zona del Paseo del Prado y el Parque del Buen Retiro, denominada ‘Paisaje de la Luz’, fue designada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO”.
La Comunidad de Madrid concentra dos de cada tres euros de inversión extranjera que llegan a España. Solo en el primer semestre de este año ha recibido el 63,2% de la inversión extranjera que llega a nuestro país.
Para el inversor o la empresa extranjera que busca instalarse, Madrid ofrece un proyecto de vida para sus managers y empleados. Los primeros buscan y encuentran talento y ambos ven la posibilidad de tener un sólido proyecto de vida, con servicios públicos de calidad en materia sanitaria y de educación.
Detrás de este crecimiento global del “prime” en Madrid se encuentran la concurrencia de grandes inversores, una economía que comienza a ser dinámica, y el desarrollo de proyectos de enorme envergadura. Madrid ofrece máxima seguridad jurídica, estabilidad institucional y facilidad de contacto e interlocución con el tejido productivo. Tiene un compromiso firme por seguir progresivamente bajando la presión fiscal y lanzando instrumentos nuevos dirigidos a favorecer esa inversión y, además, en comparación con otras CCAA, ofrece una mayor agilidad administrativa.
Debido a lo expuesto en el último año las propiedades “prime” o de “alto standing” han aumentado a ritmo constante. Ese aumento anual es de 2,1% en promedio. Más allá de la incertidumbre financiera, el mercado inmobiliario se encamina hacia la estabilidad en la zona euro.
Los datos son los datos. Como empezamos diciendo, Madrid está de Moda. Y no parece que vaya a ser una moda pasajera…
